Sentirse observado es una sensación extraña. Especialmente cuando sabes que quien lo hace es tu perro. Y aunque sea menos desconcertante que cuando lo hace una persona, sigue provocando cierta inquietud.
Hay razones por las que los perros miran atentamente a sus propietarios y, normalmente, hay un significado detrás. La mirada de tu perro puede estarte diciendo algo, y saber interpretarla mejorará vuestra comunicación y aumentará vuestra complicidad.
Desde Adiestrar Perros queremos explicar qué se esconde detrás de la mirada de los perros, porque una buena comunicación es básica para su obediencia y su bienestar.
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ToggleReconocer la mirada de tu perro
Ojos deseosos: tú tienes lo que quiere
Cuando tu perro mantiene su mirada fija, suele ser porque tienes algo que quiere. Puede ser un juguete, un suculento bocado, una mano que debería estar acariciándolo, o la decisión de salir a dar un paseo.
Los perros aprenden rápidamente que su mirada es una manera efectiva de pedir algo que quieren. De hecho, muchos propietarios la fomentan sin saberlo cuando responden a esa mirada.
Darle comida por debajo de la mesa o sacarlo asumiendo que estaba pidiendo salir son formas de premiar y reforzar la conducta. Y aunque pueda ser molesto saberlo, siempre será mejor que los ladridos, los llantos o los mordiscos.
Cabeza inclinada: confusión
En las sesiones de adiestramiento canino a menudo se ve que los perros inclinan su cabeza con la mirada fija. Y eso suele ser un signo de confusión. El perro está intentando saber qué es lo que tú quieres, de la misma manera en que tú intentas adivinar qué quiere él.
Si ves que la mirada de tu perro va acompañada de ese gesto confundido, es momento de que retrocedas un poco en su entrenamiento y que encuentres una manera más clara de comunicarte con él.
Recuerda que premiar a tu perro cuando hace lo que le pides es tan importante como tener una señal de ausencia de refuerzo. Esto es comunicarle de forma clara que su respuesta no ha sido correcta. Para más información, échale un ojo a nuestro artículo sobre el Feedback.
Mirada firme y directa: tu perro está tenso
Hay muchos tipos de mirada, y todos quieren decir algo.
Pero una mirada firme, con pupilas dilatadas suele ser una señal de ataque que puede durar un breve instante o largos minutos. Para añadir un poco confusión, además, muchos perros desvían la mirada antes de morder.
Si vas a acariciar a un perro, te estás acercando a su juguete, su plato de comida o su espacio propio, y detectas una mirada firme y directa, aléjate. Porque puede requerir práctica y experiencia reconocer la diferencia entre una mirada de deseo y una de advertencia.
Detectar otras señales puede ser la clave para saber si es mejor darle espacio. Por ejemplo:
- Cola tensa (moviéndose o no).
- Boca cerrada (mostrando los dientes o no).
- Cabeza baja
- Orejas hacia delante o hacia atrás
- Cuerpo desplazado hacia delante
Saber reconocer estas señales es vital para identificar lo que se llama “la zona crítica”. Lidiar con la agresividad de los perros no es fácil, pero lo mejor que se puede hacer es alejarse, y dejar su tratamiento en manos de un etólogo canino o un adiestrador profesional.
Mirada tierna: puro amor
En el otro extremo, la mirada de tu perro puede ser tierna y relajada, con un movimiento de cola moderado y relajado, un leve jadeo y orejas relajadas. Eso significa devoción y amor. Tu perro te quiere y te lo está haciendo saber.
Y es que si un perro está corriendo, jugando, o en plena sesión de entrenamiento, es menos probable que te lo transmita. Sus motivaciones del momento no van por ese camino.
Un sonado estudio de la Universidad de Portsmouth en 2019 desveló que los perros han desarrollado un músculo que les permite levantar las cejas para inspirarnos ternura y transmitirnos sus emociones (o conseguir lo que quieren). Pero es que, en 2015, la revista Science publicó un artículo hablando de cómo perros y humanos liberan oxitocina (conocida como “la hormona del amor”) cuando se miran fijamente a los ojos.
Caza y pastoreo: tu perro está al acecho
Los perros pastores son propensos a observar atentamente su entorno, como forma de controlar el movimiento de ovejas, cabras, vacas, juguetes, y también humanos. Los perros de caza también.
Este comportamiento puede un juego, o un índice de que va a empezar una persecución. Suele aparecer en espacios exteriores abiertos, como parques y bosques. Por eso, si ves que tu perro frena su marcha, baja la cabeza, y se pone a mirar a la distancia (o a una potencial presa), es que está sacando a relucir su instinto pastor o cazador.
Conclusión
La comunicación es la parte más importante del adiestramiento canino, y un pilar fundamental de la relación entre perros y humanos. Sin una buena comunicación, tu relación con tu perro tendrá vacíos y lagunas que pueden darte alguna sorpresa.
El contexto es clave para entender lo que tu perro te intenta decir con la mirada. Pero también lo es saber cómo funciona el lenguaje corporal de los perros. Porque, a falta de palabras, usarán todo aquello que genere una respuesta por tu parte.